Si tienes la intención de vender alguna de las propiedades que tienes o hacer un alquiler vacacional, una de las mejores soluciones que existen es elegir una buena inmobiliaria, como por ejemplo la inmobiliaria Ana Tecles. Estas tienen como objetivo ponerte las cosas fáciles para conseguir la máxima cantidad de dinero. Además, también harán que no tengas que preocuparte por el papeleo habitual en este tipo de transacciones.

Los asesores que trabajan en las inmobiliarias son conocedores del mercado de la compra/venta de pisos. Esto conseguirá que te puedas hacer una idea muy concreta de la cantidad por la que puedes vender tu inmueble y, además, un tiempo estimado en el que se conseguirá esto. Y, siempre, con una alta confianza, algo que resulta clave en todo proceso de venta.

Las claves para elegir una buena inmobiliaria

Para realizar una buena elección y poder despreocuparse por completo a la hora de vender una casa o chalet, existen algunos consejos que son importantes. Si los sigues, seguro que te decidirás por una inmobiliaria que cumplirá con las expectativas que puedas tener.

Referencias

Busca a personas que han sido clientes de las diferentes inmobiliarias que valoras contratar. Esto podrá indicar cuál ha sido su experiencia y, por lo tanto, si realizan de forma adecuada su trabajo. Eso sí, analiza lo indicado bien, ya que pueden existir casos puntuales que no te sirvan como indicativo de su forma de trabajar.

Todo claro y firmado

Esto es vital. En el contrato que firmes con la inmobiliaria se debe establecer la relación con claridad. Apartados como la exclusividad o la comisión que cobran en la venta siempre debe quedar por escrito. De esta forma, evitarás desagradables sorpresas.

Experiencia

Que sea lo más amplia posible es de lo más recomendable. Si esto es así, la garantía de éxito es mucho mayor, ya que la inmobiliaria conoce perfectamente el terreno que pisa. Esto no debe significar que descartes al resto, pero siempre aumenta la confianza saber que estás en manos de agentes cualificados y que conocen bien su trabajo.

Seguimiento

Esto es cada vez más importante. La idea es que la inmobiliaria se encargue del trabajo de venta en su totalidad, pero lo ideal es que estés informado. Detalles como por ejemplo si se realizan visitas o si es necesario cambiar el precio siempre se deben comunicar. Estar al día siempre es positivo y aporta confianza.

Selección de compradores

No vale cualquier persona a la hora de vender un inmueble. Lo ideal es que la inmobiliaria realice un filtrado de los potenciales compradores y únicamente te remita ofertas de compradores cualificados. Para ello, la realización de un estudio de documentación es básica. Es una de las funciones que tienen que realizar para que su trabajo de venta y asesoramiento sea adecuado.

A todo lo comentado debe sumarse la paciencia. Hablamos de ventas con importantes inversiones de capital, por lo que no siempre la rapidez es la esperada. Si la inmobiliaria hace bien su trabajo, la propiedad la venderás… aunque se tarde algo más de lo esperado. En definitiva: las prisas no son buenas consejeras.