Malas noticias para el turismo español porque el Gobierno, con el argumento de la necesidad de tomar medidas de austeridad para así poder reducir el déficit, ha incluido al sector turístico en sus recortes y destinarán este año un 19,79% menos que para el pasado 2010, quedando en un monto de 622,43 millones de euros.

Estos presupuestos tienen como líneas de actuación, la adaptación del producto “Sol y Playa”, a los nuevos desafíos y tendencias, por el desarrollo de los nuevos productos turísticos y consolidar más aún a los destinos maduros mediante diferentes apoyos del Fondo Financiero para la Modernización de las Infraestructuras Turísticas, FOMIT.

El Gobierno español también tiene pensado destinar 300 millones de euros, 100 menos que el pasado año, para el conocido Plan FuturE y para la línea de préstamos bonificados ICO que se destinarán al fomento del uso racional de la energía por los diferentes establecimientos turísticos.

Y para la infraestructura aeroportuaria, desde el Gobierno se prevé una cantidad de 1.345,5 millones de euros para el presupuesto del próximo año, un 28% menos que los presupuestos del pasado 2010.