Han sido cientos de pasajeros los que han pasado el día de Navidad en diferentes terminales aeroportuarias de Europa tras haber dormido en camas improvisadas a causa del mal tiempo y a la falta de líquido anticongelante para los aviones, lo que obligó a la cancelación de los vuelos desde París y Bruselas.

Los vuelos fueron poco a poco recuperando su normalidad gracias a la llegada de anticongelante desde Alemania y Estados Unidos, lo que permitió que fueran despegando los aviones, aunque muchas de las personas que estaban en los aeropuertos se perdieron la tradicional comida de Navidad en sus lugares de destino.

Las bajas temperaturas acompañadas de las fuertes nevadas llevan varios días interrumpiendo los viajes a miles de pasajeros de toda Europa, ocasionándoles serios problemas para poder llegar a sus casas y pasar unas vacaciones en familia.

Pero no solo los aeropuertos se vieron afectados sino que también el tráfico ferroviario de alta velocidad se ha visto interrumpido debido a la nieve y también hubo congestiones en las carreteras de Inglaterra y Suecia, lo que ha podido confirmar que ha sido uno de los meses de diciembre que más nieve ha traído de los que se recuerdan en el viejo continente.

Vía: Reuters