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La compañía aérea Iberia está estudiando la aprobación de un nuevo Expediente de Regulación de Empleo voluntario tanto para su personal de tierra como de oficinas durante el próximo año 2016 en caso de que el Tribunal Supremo llegue a rechazar su recurso sobre la decisión que tomó la Audiencia Nacional de limitarse únicamente a la validez del ERE que ya tiene en vigor, algo que fue acordado entre la compañía y los sindicatos en julio del pasado año 2014.

El ERE en vigor fue voluntario y pudieron acogerse hasta un máximo de 1.427 trabajadores de los colectivos de tierra y pilotos y la vigencia se extendería hasta el 31 de diciembre de 2017, a pesar de haber sido recurrida por el sindicato minoritario CGT.

De esta forma, si se confirma esta suspensión para los próximos años 2016 y 2017, la compañía aérea se plantea llevar a cabo un nuevo ERE voluntario tanto para tierra como para personal de oficinas.

Fueron unos 900 empleados quienes se acogieron al ERE voluntario, de los cuales 244 son pilotos, aproximadamente la totalidad del ajuste que se ha pactado, cifra que podría aumentar a medida que nos vayamos acercando al final del año, tal como declaró el presidente de la compañía Luis Gallego.