Roma es una de las capitales europeas de visita obligada siempre que se viaje por el viejo continente. El turismo en Roma siempre deja un buen sabor de boca a todos los viajeros, incluso a los más experimentados. Son muchos lugares los que hay que visitar y muchos de ellos son un clásico en este destino.

Qué ver en Roma

Uno de ellos es el Panteón, un rincón al que se puede entrar gratis y que es como hacer un viaje en el tiempo, donde poder admirar su cúpula o sus famosas columnas. Además puedes conocer su historia, la cual está repleta de interesantes misterios.

La Fontana de Trevi es una de las fuentes más cinematográficas de la historia y uno de los rincones gratuitos más visitados en este destino. Puedes intentar sacarte una foto con la fuente a tu espalda y si quieres seguir la tradición y volver de nuevo a la ciudad, debes tirar una moneda estando de espalda a la fuente.

Las plazas son unos de los lugares públicos más famosos de esta ciudad y Roma tiene muchas esperando a ser descubiertas o redescubiertas si eres de los que repite en este destino. Una de las más famosas es la plaza Navona, siempre repleta de turistas procedentes de todos los rincones del mundo y también por los locales, tanto para pasear, charlar o comer, por ejemplo.

Otra plaza donde siempre hay gente es la de España, sobre todo en sus escaleras, atestadas siempre de turistas descansando de sus paseos por la ciudad, sacándose fotos, tomando algo o conociendo a gente de cualquier lugar del planeta.

La plaza del Popolo es una de las más importantes porque aquí es donde se hacen muchos de los eventos públicos de la ciudad. Puede ser uno de los puntos de partida para salir a conocer Roma gracias a su ubicación.

¿Verdad o mentira?

Si quieres hacer algo clásico, además de lanzar la moneda a la Fontana de Trevi, puedes meter la mano en la Bocca della Verità o Boca de la Verdad. La leyenda dice que hay que introducir la mano en la boca de este disco con forma de rostro y que si se miente, la boca se cerrará con gran fuerza. La encontramos en la fachada de la iglesia de Santa María in Cosmedin.

No hay que olvidarse de otros rincones como la Basílica de Santa María del Popolo, Villa Borguese o el Puente de Sant’ Angelo. O incluso ya que se está en esta ciudad, otra opción muy interesante es buscar qué ver en el Vaticano, para completar la experiencia en este viaje.

Los Museos del Vaticano son imprescindibles en esta escapada Además, si se visita el último domingo del mes la entrada es gratuita, aunque no es algo que solo sepan unos pocos sino que lo sabe todo el mundo y pueden llegar a formarse colas verdaderamente largas.

¿Te animas a una escapada a estos dos rincones de Italia?