Desde hace muy poco ha entrado en vigencia la prohibición de fumar en diferentes espacios públicos de la ciudad de Nueva York como son todos los parques y playas de esta ciudad, las cuales se promocionarán como destino de aire puro, algo que será fantástico para los no fumadores.

Primero fueron los bares y restaurantes de la ciudad y ahora los parques y playas de la ciudad tal como anunciaba Michael Bloomberg, el alcalde de la ciudad, quien además declaró: “La ciencia habla claro sobre este tema: una exposición pasiva prolongada al humo del cigarrillo, tanto sea en el interior como en el exterior, perjudica a la salud. Hoy, actuamos al respecto”.

Lo que se pretende es convertir a la ciudad de Nueva York en un lugar más sano y donde todos aquellos que pasean por los parques y playas o van a bares y restaurantes no sufran los males de los fumadores pasivos.

De esta forma todos aquellos que tengáis pensado viajar a la Gran Manzana y pasear por Central Park o cualquiera de los más de 1.700 parques que tiene la ciudad y sus más de 22 kilómetros de playa, os encontraréis un espacio totalmente libre de humo.

Vía: El Mundo