Entre Suiza y Austria, Liechtenstein es un pequeño principado y un verdadero paraíso para los que buscan aire puro y montañas nevadas. Sin duda Liechtenstein cuenta con muchos lugares interesantes para ver.

Es el cuarto país más pequeño de Europa. En la lista de los países más pequeños del mundo se encuentra en sexta posición. Es famoso por los deportes de invierno, especialmente el esquí alpino. Las tradiciones locales y los intercambios internacionales han hecho que la vida cultural de Liechtenstein sea muy animada. Conciertos, representaciones teatrales, galerías de arte hacen que el Principado sea atractivo para los turistas también desde un punto de vista puramente cultural.

Su capital

Vaduz, la capital, sólo tiene 5 mil residentes permanentes. Ofrece a los visitantes muchas atracciones y actividades. Tiene más el tamaño de un pueblo que de una ciudad, y se encuentra en la orilla derecha del Rin. A pesar de su pequeño tamaño y escala humana, Vaduz es la sede de las oficinas administrativas del principado, el parlamento y la residencia del príncipe.

Lugares para ver en Liechtenstein

A continuación vamos a hablar de los lugares para ver en Liechtenstein que no debes perderte.

La Catedral de San Fiorino

Fue construida entre 1869 y 1873 con la financiación de los príncipes de Liechtenstein. En la actualidad es sede de la archidiócesis y está construida enteramente con un estilo neogótico. Tiene una torre y cuatro pequeños relojes en sus fachadas. La catedral es realmente inmensa, su exquisito interior está perfectamente acompañado por la belleza de los accesorios y el altar.

El Castillo de Vaduz

Pertenece a la familia real desde 1712. El castillo de Vaduz es la residencia oficial de los príncipes de Liechtenstein desde 1938. No está abierto al público, pero su silueta entre las altas montañas que lo rodean, bien merece un recuerdo fotográfico. La visita a pie comienza en el centro de la ciudad y dura unos 25 minutos desde el punto de información. También se puede llegar hasta el castillo en coche. Al final del paseo se puede ver el exterior del castillo y admirar Vaduz desde lo alto.

El museo nacional de arte moderno y contemporáneo

Alberga colecciones de arte adquiridas por los príncipes de Liechtenstein y también interesantes exposiciones temporales en su moderno y futurista edificio. El edificio, inaugurado en el  año 2000, se asemeja a una caja negra de hormigón, basalto y guijarros de río que recuerda el paisaje del valle del Rin. En el interior, como en un sistema de cajas chinas, hay un cubo blanco alrededor del cual se disponen todos los espacios de la exposición. La historia del país sólo se cuenta aquí en idioma alemán. Ni siquiera el inglés es usado en la visita guiada del museo. Sin embargo, es un destino interesante para los que deseen conocer las raíces del principado.

¿Cuándo ir a Liechtenstein?

Este país se puede visitar en cualquier época del año. Pero la temporada de verano, de junio a septiembre aproximadamente, es la que más invita a realizar agradables actividades al aire libre. Desgraciadamente, la gran afluencia de turistas durante este periodo también provoca un aumento considerable de los precios.

Desde este punto de vista, las mejores estaciones son la primavera, de abril a mayo. O el otoño, desde finales de septiembre a octubre. En estos meses el clima es agradable y muy cálido durante las horas diurnas. Por la noche, en los valles especialmente, son frecuentes las lluvias. También hay mucha probabilidad de tormentas por la tarde, sobre todo hacia las montañas.

Si es un aficionado a los deportes de invierno, tenga en cuenta que en los Alpes la temporada de esquí comienza a finales de noviembre y termina en abril cuando la nieve empieza a derretirse.