La alemana isla de Helgoland se encuentra con un montón de turistas que han quedado encerrados en este lugar debido a la interrupción de los servicios de ferris a causa de las grandes olas que han azotado la zona durante los últimos días.

Tal como destacó el jefe del servicio turístico de Helgoland, Klaus Furtmeier: “es inusual que los ferries no funcionen durante tres días seguidos y ocasionen estos problemas a las personas que se han tenido que quedar aquí obligatoriamente”.

Esta isla se encuentra a unos 50 kilómetros al norte de la Alemania continental y es una isla que cuenta con su propia, aunque turbulenta historia. Estuvo bajo dominio danés, inglés y después alemán desde 1890 y fue usada como base naval alemana en las dos guerras mundiales.

En 1947 Gran Bretaña intentó destruir las instalaciones militares de la isla con la mayor explosión no nuclear registrada hasta entonces. Pero en 1952 Helgoland fue devuelta a Alemania y los ciudadanos que sobrevivieron a la guerra pudieron regresar tranquilamente.

Vía: ADNMundo